La mayoría de las relaciones a distancia fracasan porque no existe intimidad entre los 2 integrantes de la pareja. Sin embargo, ahora la tecnología permite acabar con estas barreras. Lo cierto es que tan solo nos hace falta un móvil, tablet u ordenador con cámara, y conexión a Internet, para poder tener esa intimidad. Si, nos estamos refiriendo al sexo a distancia. Pero no sólo del típico sexo telefónico para hacerte una paja por teléfono, no, estamos hablando de ir más allá.
Imagínate qué te puedes meter bajo las sábanas, al mismo tiempo que tu pareja y sentir como si ella o él estuviese a tu lado. Bueno, casi…
La industria de los juguetes sexuales se encuentra muy avanzada en este sentido. Esta intenta mejorar las relaciones sexuales a distancia de formas que nunca habríamos creído posibles.
David Cantón, un ingeniero sevillano experto en programación nativo de Sevilla ha creado un sistema que ha bautizado como iPush, y que puede cambiar de una vez por todas el enfoque del sexo a distancia.
¿En qué consiste el iPush, una forma de sexo a distancia, y cómo puede mejorar nuestras relaciones sexuales?
El iPush es un sistema que está compuesto por 2 dispositivos que se pueden introducir en los genitales. Estos tienen diferentes sensores capaces de recoger datos clave para el proceso. Algunos datos son la temperatura, presión y hasta la humedad, consiguiendo que se repliquen en el dispositivo que está usando el usuario.
Estos sensores se han construido con motores mecánicos e hidráulicos, pudiendo reproducir los movimientos de cada usuario.
El dispositivo para el hombre es un cilindro hueco, debidamente acolchado y ergonómico. De esta manera puede introducir en él su miembro viril de la forma más cómoda.
En el caso de la mujer, el dispositivo femenino tiene forma de miembro masculino extensible y retirable, capaz de emular la misma profundidad y los movimientos que haría el miembro viril masculino.
Pero esta tecnología todavía puede sorprendernos más. Cada uno de estos aparatos integra un pequeño depósito con lubricante, que lo irá liberando según cada momento. También tiene un arnés que permitirá un mejor ajuste en el cuerpo de cada uno de los miembros de la pareja.
Se conectan con el teléfono móvil mediante la conexión de bluetooth, además de con una app que permitirá transmitir los movimientos que se hagan durante el acto sexual. Así, también podremos ver y escuchar a nuestra pareja en todo momento.
Mientras llega o no llega esta tecnología (todavía es una iniciativa de crowdfunding que puede que no llegue a comercializarse), recuerda que existen algunos juguetes sexuales que se pueden controlar a distancia. Hablamos de bolas chinas, anillos vibradores, ropa interior que vibra, y toda una larga serie de gadgets que se pueden controlar directamente a través del teléfono móvil, incluso aunque estemos en la otra parte del mundo.
La experiencia no va a ser la misma que mantener sexo con la otra persona a nuestro lado, pero puede ser un buen sustituto mientras esperamos que esto ocurra.